Los ejercicios de conexión a tierra pueden ayudarle a cambiar su enfoque de los pensamientos y emociones negativos y a volver al momento presente.
Practique estos ejercicios como parte de su rutina diaria o cuando note que se siente estresado/a.
Pruebe al menos una de las técnicas de esta página y practíquela tres veces esta semana. Lleve un registro de cómo se siente antes y después.
Puede que tenga que probar varios ejercicios de conexión a tierra diferentes hasta encontrar los que mejor le funcionen.
- Nombre cinco objetos que vea, cuatro cosas que sienta, tres que oiga, dos que huela y una que saboree.
- Recuerde toda la letra de su canción favorita.
- Elija una categoría, como colores, animales o alimentos, e intente nombrar al menos 10 cosas en esa categoría.
- Elija una forma, como un triángulo, un óvalo o un cuadro, e intente encontrar todos los objetos que le rodean con esa forma.
- Mientras esté sentado/a, preste atención al peso de su cuerpo en la silla, a la sensación de la silla contra su espalda y a la sensación de sus pies en los zapatos o tocando el suelo.
- Lleve un objeto de conexión a tierra en el bolsillo que pueda tocar siempre que quiera sentirse más conectado a tierra. Su objeto puede ser algo que tenga un significado, como un trozo de una camiseta vieja o una pequeña concha de su playa favorita. También puede elegir uno que tenga una textura interesante, como una piedra lisa.
- Coloque una toallita fría en su cabeza o en su cara. Para este ejercicio, ponga en su refrigeradora una toalla de mano con aceite esencial de lavanda.
- Apriete un cubito de hielo en la mano. Sujete el cubito de hielo hasta que sienta que se derrite en su mano. Observe cómo cambia de temperatura y consistencia.
Cuando se sienta ansioso/a o molesto/a, un ejercicio de enraizamiento puede ayudarle a redirigir su enfoque de forma positiva.

